ROL DE LA PRENSA EN LA GESTACIÓN DEL GOLPE

Por Ernesto Carmona

Los medios de comunicación de Brasil están desempeñando el mismo papel que cumplieron en 1964 cuando un golpe cívico militar reaccionario derrocó a Joao Goulart con el beneplácito y apoyo de Estados Unidos. Aunque décadas después algunos grandes medios (O Globo) pidieron disculpas ante la Historia, hoy están dispuestos a repetir, según alerta la principal organización de los periodistas brasileños, FENAJ.

El Consejo de la Federación Nacional de Periodistas Brasileños (FENAJ, por su sigla en portugués), exhortó a los periodistas y a todos los ciudadanos brasileños a resistir y luchar por la democracia, la justicia y la libertad. Asimismo, llamó a todos a salir hoy a las calles para decir ¡No vamos a aceptar golpes!, con un lúcido análisis político sobre el papel de los grandes medios y otros poderes ilegítimos en la crítica situación política del país.

“Un inminente golpe de Estado travestido de impeachment (juicio político) comprometerá de manera grave la todavía frágil democracia brasileira. Por eso, la FENAJ llama a la sociedad, en particular a los periodistas brasileiros, para concitar a todos a defender la democracia, la justicia, el Estado de Derecho”, señalan los periodistas de Brasil.

“No se fortalece la democracia irrespetando las reglas democráticas”, añadió el llamado de la FENAJ. “No se hace justicia con ajusticiamiento. No se avanza en las conquistas sociales irrespetando las garantías individuales previstas por el Estado de Derecho. No se supera la crisis económica arracimándola con una crisis política forjada por los derrotados en las urnas. No se construye ciudadanía con manipulación de información y linchamientos mediáticos”.

La FENAJ reafirmó su posición en defensa de las libertades de expresión y de imprenta y, como lo hizo más de una vez, condenó a “los medios de información que dejan de lado su importante misión de informar a la sociedad brasileira, para asumir claramente un papel de opositores al gobierno federal y de defensores del golpe. Ésa fue la misma posición de la prensa brasileira en el golpe de 1964. Algunas empresas llegaron a pedir disculpas por el error cometido, pero vuelven a cometerlo. Ciertamente tendrán que volver a explicarse ante la historia”.

Para los periodistas, “la democracia exige que las instituciones nacionales (federales) cumplan el papel que les corresponde. Por tanto, es inadmisible que la prensa renuncie a llevar información de calidad a la sociedad, investigando y reportando datos. La prensa no puede servir de instrumento político a nadie y mucho menos repetir acríticamente las versiones, filtraciones selectivas y pronunciamientos favorables al propósito golpista”.

Los periodistas también estiman que para fortalecer la democracia, el poder judicial no puede renunciar a los principios de la justicia. El carácter mediático de la “Operación Lava Jato” y los excesos cometidos por el juez Sergio Moro (siempre con el apoyo de ciertos grandes medios informativos [locales e internacionales]) muestran que el poder judicial está siendo utilizado como instrumento golpista. El Tribunal Supremo Federal, como la más alta instancia de la Justicia de Brasil, debe asumir la función de salvaguardar la imparcialidad que requiere la justicia. Los jueces deben actuar como tales, y no como agentes políticos; debe hablar como magistrados, y no para incitar al pueblo contra cualquier persona.

La FENAJ recuerda que el actor central en el golpe de estado en curso es un grupo parlamentario que si llegará a tener éxito persistirá la corrupción en la democracia brasileña. Su llamamiento clama: “No podemos entregar el país en manos de conspiradores o políticos acusados ​​de diversos delitos. La sociedad brasileña no puede aceptar la injusticia de la condena de la Presidenta por los políticos que practicaban y practican los actos que presuntamente cometió la Presidenta de la República. No hay ninguna prueba del supuesto crimen de la Presidenta Dilma y el impeachment (juicio político) es un golpe, sin base legal, motivado por razones oportunistas y revanchistas.

Mapocho Press / 31-03-2019

Fuente:

http://www.fenaj.org.br/materia.php?id=4503