A DOS AÑOS DE UN MUNDO DESAFIADO POR EL COVID19

Se han completado dos años, desde fines de noviembre de 2019, cuando el mundo conoció la existencia del coronavirus, que algunos meses más tarde la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que dio lugar a una pandemia. Los impactos económicos fueron múltiples. La economía china, donde se detectó inicialmente el virus, experimentó una profunda recesión en el primer trimestre de 2020, después de décadas de crecimiento. El primer semestre de 2020 tuvo lugar una recesión global sincrónica, con repercusiones múltiples en la generalidad de los países, incluido desde luego Chile. La respuesta de gobiernos y bancos centrales igualmente no tuvieron puntos de comparación con crisis anteriores. Al enterarse el segundo año, en un momento de recuperación de la economía global, el virus experimentó una nueva mutación, denominada ómicron, una de cuyas características, destacada por la OMS, es la velocidad de su propagación.

Los impactos económicos y sociales durante la pandemia que fueron muy fuertes, profundizando la desigualdad entre países y al interior de ellos, comenzaron nuevamente a manifestarse, provocando restricciones a nivel mundial, incluyendo suspensión de preparativosr4e las tradicionales festividades navideñas, con efecto en el comercio y más aún en el turismo, uno de los sectores más golpeados durante estos años. El día 18 de diciembre la existencia del ómicron se constataba ya en 89 países y con seguridad, como observó la OMS, existía también en la generalidad del resto. Ello conducía a que en los países donde predominaba el nuevo virus se registrasen restricciones cada vez más acentuadas. Así ocurrió en Nueva York, que el mismo día 18 vivió el nivel de contagios más elevado desde que se desató la pandemia. Igual situación se manifestó cuatro días después en Madrid, igualmente con el nivel más alto de contagios desde que estalló la pandemia, con elevada congestión en los servicios primarios de salud, no así en las UCI, dado la menor gravedad de los contagios.

En Chile, los días anteriores a las fiestas navideñas, la presencia del ómicron era baja. Según el ministro de Salud se habían contabilizado 73 casos, “todos son viajeros, y la mayoría viene de Estados Unidos, casi el 80%. En ese país, ómicron -agregó- representa más del 70% de los casos que se están detectando”. La velocidad de la transmisión en los países donde se ha expandido hace prever que su expansión crecerá a nivel global.

En Holanda, el mismo día 18 se decretó un confinamiento riguroso, que durará hasta el 14 de enero, cerrando toda actividad considerada como no esencial. “Entendemos fue inevitable -manifestó el primer ministro Mark Rutte- debido a la quinta ola de la pandemia, oleada causada por la variante ómicron, que se nos viene encima”. Al mismo tiempo, Corea del Sur, que fue uno de los primeros países en controlar el virus, estableció medidas de cierre obligatorio para lugares públicos y restringió los encuentros entre privados a solo cuatro personas.

El día 24 las restricciones tomaron expresiones globales por la suspensión de miles de vuelos, más de quinientos de ellos partiendo o llegando a EE. UU., en numerosos casos por no disponer de tripulaciones o de personal que los operan. Una vez más el transporte es una de las primeras actividades golpeadas por la nueva oleada de la pandemia, en esta oportunidad además restringiendo los festejos navideños. La aerolínea United Airlines en un comunicado constató el “impacto directo” del contagio en las tripulaciones y el personal de apoyo. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE. UU. constataba a su vez que la variante ómicron se había convertido ampliamente en la predominante en el país, explicando el 73,2% de los nuevos casos. En Europa, Alemania, Finlandia y Portugal volvían a establecer restricciones en los sectores del ocio y restaurantes. En América del Sur, Perú prohibió reuniones familiares y fiestas en Navidad.

De otra parte, la pandemia sigue haciéndose presente en la economía china, donde se ha logrado un nivel importante de control. El 22 de diciembre sus autoridades determinaron cerrar la ciudad de Xian, capital de la provincia de Shaanxi, de trece millones de habitantes, muy superior a Santiago, después de registrarse 143 contagios desde el día nueve. Es la primera ciudad importante que se cierra después de Wuhan, cuando han transcurrido dos años de ese momento. Muestra que el virus sigue manifestándose y la decisión continúa siendo enfrentarlo con medidas muy radicales. Todos los habitantes de Xian deben permanecer en sus viviendas y uno solo de sus integrantes puede salir cada dos días para adquirir bienes.

Al nivel global, la pandemia provocó un aumento en la desigualdad. El laboratorio francés de Ideas, World Inequality Lab., codirigido por Lucas Chancel, Thomas Piketty, Emmanuel Saez y Gabriel Zucman, dieron a conocer un estudio donde constatan que entre 2019 y 2021, el 0,001% de la población mundial más rica incrementaron sus fortunas en un 14%, mientras cien millones de personas ingresaban a la pobreza extrema. El 10% más poderoso señala, además, son poseedores de las tres cuartas. partes de la riqueza mundial. “Observamos todavía un mundo más polarizado -resumió Lucas Chancel, quien dirigió la investigación- la covid ha amplificado el fenómeno del ascenso de los multimillonarios y ha dejado más pobreza”.

Esta realidad fue cuantificada a nivel de países por un reportaje de El País, usando cifras del Fondo Monetario Internacional, al divulgar estadísticas de la variación del producto durante la pandemia, con base cien el año 2019, considerando las variaciones del nivel de actividad registrados en 2020 y 2021 cuando el año ya estaba próximo a finalizar. Se constató que 51 de los 192 países, considerados por el FMI en sus Perspectivas Económicas Mundiales, tiene un nivel del producto al finalizar 2021, inferior al año base. Entre estos países existen tres naciones sudamericanas (Venezuela, Argentina y Ecuador), con caída en los niveles de actividades desde antes de desatarse la pandemia.

Encabezando el listado de las economías de mayor crecimiento Guyana, pequeño país del Caribe, favorecido por un boom del petróleo iniciado antes de la pandemia, que al finalizar 2021 triplicará su producto. Le sigue Irlanda con una expansión del 24%, favorecida por la presencia de grandes transnacionales en su economía que la usan para cancelar menos impuestos al declarar sus utilidades. Luego se ubican países emergentes, encabezados por China (17%). En el periodo analizado se produce un aumento de la deuda pública utilizando siempre los datos y estimaciones del FMI para los años considerados, con la excepción de 25 países que la disminuyeron en oposición, señala El País al dar a conocer estas cifras, “a cualquier expectativa previa. Son en su mayoría -añadió- países de Asia y África, enormemente pobres cuya capacidad de endeudamiento para revivir la economía ha sido mínimo”.

Hugo Fazio

Diciembre 2021