Del matrimonio se han dicho muchas cosas, que es producto del amor, que ahí deben nacer los hijos, que es el comienzo de una nueva familia… Muchas más cosas pero lo que verdaderamente es el matrimonio y que resulta inevitable vivirlo, es que por este medio, por este instrumento, se unen dos personas venidas de dos familias diferentes y que además provienen de otras dos familias… En concreto, el matrimonio es la unión de familias.
En este caso participamos del matrimonio de dos seres angelicales, dos seres venidos a este planeta por algo que unía a esas familias. Daniela y Simón se unen en matrimonio, eso es indiscutible, pero lo que no se dice es que en este acto se unen cuatro familias: los Uribe, los Guajardo, los Bonati y los Cottet. Cuatro familias que sólo el acto de unión de estas dos personas tranforma en una.
Eso es obra de Daniela Bonati Uribe y Simón Cottet Guajardo. Cuatro familias reunidas en un rito que obliga determinados pasajes donde cada una aporta lo suyo. Es la tradición que deben estar los padres, deben llegar los hermanos, primos, tios, amigos. Se producen encuentros, abrazos, parabienes. Se espera que el matrimonio reuna a cada una de las cuatro familias en pleno.
El objetivo de Simón y Daniela es que lo suyo sea eterno, que las familias se reencuentren y sea así conjugado el verbo eterno del amor. Pero no todos llegan, algunos no pueden viajar, otros ya marcharon a un territorio que para nosotros resulta misterioso, y otros no alcanzaron a enterarse de este evento. Falta, por ejemplo Alicia y Pablo, abuelos de Simón, faltan otros amados y extrañados.
Por ejemplo, falta Luis Guajardo Zamorano, tío de Simón, hermano de Enriqueta, hijo de Eliana Zamorano y Luis Guajardo. Todos ellos están, pero Luis no llega, le esperamos, le avisamos lo del matrimonio, enviamos mensajes, pero este cabeza dura no llega, no aparece, no ha vuelto a la universidad y tarda mucho en volver a casa. Doña Eliana se impacienta, tampoco aparece Sergio Tormen, los dos eran amigos, están desaparecidos, los detuvieron, estuvieron en Londres 38 y desaparecieron, por eso no pueden venir a este evento y se le extraña.
Y como el matrimonio es la unión de familias, con sus amores y dolores, esta unión de Daniela y Simón es también la unión en el dolor de la desaparición de Luis. Desde hoy Luis desapareció de los Guajardo, desapareció de los Uribe, desaparecio de los Bonati, desapareció de los Cottet.
Falta Luis, aunque a veces hasta nosotros lo olvidamos, falta, profundo, lleno de este país, falta y cada día falta más.
Seguro hubiese querido llegar en bicicleta, seguro estaría bromeando con Simón.
Las cuatro familias ahora nos unimos en una. No es necesario vernos todas las semanas, no es necesario declararnos simpatía, estamos unidos por Daniela y por Simón, eso es suficiente. Nos une la nueva familia Cottet Bonati y la ausencia de Luis, que ahora le falta a cada una de las cuatro familias que hoy día nos unimos.
Bienvenidos, entonces, a la nueva vida que hoy comenzamos.
Cristian Cottet