El informe de Perspectivas Económicas Globales presentado por el Fondo Monetario Internacional previamente a su asamblea semestral de octubre mostró un freno al proceso de recuperación de la economía mundial. “Los riesgos -constató su economista jefa, Gita Gopinath-, son elevados y han aumentado en los últimos tres meses, por las disrupciones prolongadas en las cadenas de suministro, por la tormenta perfecta de los mercados energéticos y porque los dilemas de las políticas económicas se han vuelto más complejos. Todo ello ha llevado -subrayó- a un debilitamiento y a un entorno más incierto”. Demandó la necesidad de la colaboración mundial, que es insuficiente, como el único escenario seguro para dejar atrás la crisis sanitaria a confluir con la climática, debido a múltiples secuencias, entre ellas la inseguridad alimentaria. El impacto de la variante Delta de la pandemia, en eslabones críticos de las cadenas de suministros mundiales ha provocado interrupciones inesperadas, que crean riesgos de inflación y debilitan la recuperación.
La proyección de crecimiento global promedio en 2021 el informe la redujo en una décima con relación a la actualización efectuada en julio, de 6% a 5,9%. Una fuerte corrección efectuó a la proyección de EE. UU., reduciendo su incremento de 7% a 6%. Para las economías avanzadas consideró que recuperarán en 2022 su tasa de expansión previa a la pandemia, mientras que la de las economías emergentes, sin considerar a China, que la ubica en este segmento, y en vías de desarrollo registrarían un aumento 5,5% menor de la tendencia previa. La de China la estimó en 8%, economía que también se desaceleró en el tercer trimestre. Debido a esta realidad, el FMI considera que se producirá una evolución en dos velocidades diferentes, influida por lo que denominan la “gran divisoria vacunal” y la clara disparidad en las políticas de estímulo implementadas. “La peligrosa divergencia en las perspectivas económicas entre países -señaló Gita Gopinath- sigue siendo una gran preocupación”.
Las cifras de evolución del producto en el tercer trimestre de EE. UU. revelaron una fuerte desaceleración, al crecer en cifras anualizadas únicamente un 2%, muy lejos del 6,3% de enero-marzo y los 6,7% en abril-junio, en los cuales influyeron a favor los cheques de emergencia proporcionados y el ritmo generalizado de reapertura empresarial. En cambio, en julio-septiembre repercutieron negativamente los incrementos de los casos de Covid-19 y la congestión global de las cadenas de suministro, aumentando el consumo solo en 1,6%. De esta manera, el crecimiento promedio de los nueve primeros meses fue de 5%, un punto porcentual por debajo de la proyección para el año del FMI.
En Alemania, la mayor economía de la Eurozona y la cuarta a nivel global, su ministro de Economía, Peter Altmaier, al finalizar octubre, adelantó que “el crecimiento de este año será menor de lo que todos imaginábamos”. Explicando el menor aumento debido a la escasez de materias primas, al alza en los precios de la energía y a una escasez de bienes intermedios “únicos en la historia”. Postergando que se regrese a los niveles previos a la pandemia hacia fines del primer trimestre de 2022, siempre que un segundo invierno pandémico no lo retrase aún más. En la misma dirección del anticipo ministerial, los principales institutos económicos del país redujeron la proyección de incremento de la actividad en 2021 del 3,7% que habían previsto a 2,4%.
El informe del Fondo constató que en numerosos países se había registrado un incremento de la inflación, debido entre otros factores al desabastecimiento de componentes, como acontece con los semiconductores. El aumento en el precio de los alimentos se nota más, destacó, en los países de menores ingresos. En EE. UU., donde hasta la fecha la Reserva Federal considera el alza de los precios como transitorio, su IPC de septiembre en doce meses anotó 5,4%, lejos del objetivo a alcanzar de 2%, constituyendo el nivel más alto en trece años. La inflación subyacente anualizada, sin alimentos ni energía, fue de 4%. Ello establece, señaló el Fondo, un desafío para las políticas monetarias que “deben caminar por una delgada línea entre abordar la inflación y los riesgos financieros y apoyar la recuperación económica”.
En los primeros nueve meses de 2021, la cotización del gas natural se quintuplicó y la del petróleo aumentó en 70%. Las utilidades de las grandes empresas del sector a nivel mundial pasaron a ser gigantescas. Saudí Aramco, la mayor petrolera, experimentó en el tercer trimestre un beneficio que superó en alrededor de un 140% la del mismo lapso en 2020. Exxon Mobil, la segunda más grande, en enero-septiembre superó en más de seis veces las pérdidas de 2020. Incluso las empresas de fracturación hidráulica del Estado de Texas en EE. UU., que estuvieron entre las que enfrentaron más dificultades durante la fase de caída, se recuperaron con los precios inéditos en tres años registrados por el crudo.
La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, luego de la reunión del Consejo de Gobierno de la institución, efectuada a fines de octubre, constató que la “fase de elevada inflación” está durando “más de lo esperado”, manteniendo la previsión de que descenderá en 2022. Las razones de esta prolongación provienen, afirmó, del “aumento en los precios de la energía, pero también porque la recuperación de la demanda está superando una oferta limitada. (…) que luego disminuirá en el transcurso del próximo año”. Se resolvió mantener las políticas de estímulo, entre ellas la compra de activos en el mercado por €1,85 billones hasta marzo de 2022.
El endeudamiento público global, por las medidas adoptadas para enfrentar la pandemia y el fuerte descenso en la actividad económica, se encuentra en niveles elevados. El FMI reiteró la formulación de apoyar a los países con más dificultades, dando como ejemplo el aumento de sus reservas en US$650.000 millones y la reasignación de recursos efectuado a los países de menores ingresos. El endeudamiento, constató paralelamente el Banco Mundial, se elevó durante 2020 al nivel récord de US$800.000 millones.
El crecimiento de América Latina en 2021, el FMI lo estimó en 6,3%, medio punto porcentual superior a la proyección efectuada en julio. Las economías de mayor incremento serían Panamá (12%) y Chile (10%: inferior en un punto a la del Banco Central). Efectuó también proyecciones del crecimiento por habitante. Para Chile subiría en 2021 a US$26.513, luego de caer en 2020 a US$$23.362, y superando los US$24.968 de 2019. Es la mayor de América del Sur, pero inferior a Panamá o Aruba que se acercarían a los US$30.000.
Colusión entre transnacionales de transporte de valores
La Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) la denuncia de colusión entre las tres empresas transnacionales que controlan el transporte de valores del país: Brink’s Chile, Prosegur y Loomis. La sanción global suma US$63 millones, alcanzando una cantidad ligeramente inferior a la colusión de los pollos, que llegó a US$63,5 millones. Siendo las sanciones propuestas para Brink’s Chile SA y Prosegur Group Andina SA las más elevadas establecidas para una empresa, US$30,5 millones y US$28,5 millones respectivamente. Para Loomis, cuya razón social es Wagner Seguridad, Custodia y Transporte, el monto fue de US$6,4 millones, empresa que se sumó a la colusión en diciembre de 2017 al ingresar al país y adquirir la empresa chilena que se puso en venta.
La denuncia corresponde a colusiones de los años 2017 y 2018, en un contexto donde las transnacionales tenían el control prácticamente total del mercado. En el segundo semestre de 2017, cuando la colusión estaba operando, la española Prosegur controlaba el 46,5% del mercado, la estadounidense Brink’s el 41,8% y la sueca Loomis el 11,8%. Además de las empresas, la presentación de la fiscalía propuso multar a sus tres gerentes generales de en dicho lapso y a dos ejecutivos regionales.
Constituye la primera delación compensada que se efectúa con posterioridad a la reforma legal de 2016, que aumentó las multas y estableció sanciones penales, que deben ser determinadas por la Corte Suprema si ratifica la demanda, destacada por el fiscal nacional económico, Ricardo Riesco, como una de las tres legislaciones “más duras en el mundo en temas de libre competencia”. De otra parte, es la primera delación compensada presentada por personas que se encuentran en el extranjero. La colusión de las empresas navieras tenía igualmente aristas internacionales, pero eran compañías, oficinas y muchas con representantes en Chile. Ello inevitablemente retrasará el trámite del proceso en el TDLC porque las notificaciones como ya comenzó a suceder van con exhorto internacional a varios países.
El engranaje del cartel fue construido en el año 2017 entre Prosegur y Brink’s concertando sus cotizaciones en el proceso de negociación que realizaron con la Caja de Compensación Los Héroes y luego al establecer las tarifas a cobrarle al BancoEstado. Posteriormente incorporaron al cartel a Loomis. El requerimiento dado a conocer específica antecedentes de cobros al segmento bancario, el cual representa aproximadamente la mitad del negocio (BancoEstado, Santander, Itaú) y no proporciona antecedentes del segmento del retail. Las tres empresas coinciden también en Argentina. Brink’s y Prosegur están presentes también en Colombia, Brasil, Perú y Ecuador, entre otros países. En 2020, las utilidades de Prosegur en la región fueron de €81 millones.
Stefan Larenas, presidente de la Organización de Consumidores y Usuarios (Odecu) manifestó que pedirán investigar el perjuicio sufrido por los consumidores finales. “En todo este tipo de colusión -expresó- siempre el consumidor es el que paga los platos rotos. Sabemos bien -agregó- que los retailers, los supermercados no perdieron nada porque traspasaron, con seguridad, ese mayor costo al consumidor final”.
La investigación se inició fundamentada en una delación compensada presentada por una funcionaria de Brink’s a varios bancos y otras instituciones, incluyendo a la Teletón de 2018. La denunciante se desempeñaba como directora general de Brink’s Chile desde el año 2012, trabajando para la empresa de capitales estadounidenses durante ocho años. Su petición la presentó el primer de octubre del 2018. La FNE demoró tres años en efectuar la investigación. En su presentación utilizó mensajes extraídos de los celulares de los ejecutivos involucrados, tras el allanamiento de sus domicilios particulares por parte de Carabineros que dan cuenta del modus operandi del cartel. Parte de los antecedentes estaban encriptados, por lo cual debieron recurrir al FBI para conocerlos. Ello demuestra que estaban plenamente conscientes de sus conductas.
La española Prosegur y la sueca Loomis ya tenían condenas anteriores por actos de colusión. En 2015, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia de España (CNMC) recibió una denuncia anónima de irregularidades en el mercado de transporte de valores, siendo sancionados en €46,44 millones un año después. En esa época más empresas tenían un duopolio en el mercado de transporte de valores, “CNMC ha acreditado que estas empresas -señaló la resolución- se han repartido el mercado, han acordado precios y se han intercambiado información comercial sensible durante siete años para el transporte y manipulación de fondos que, según la normativa vigente, deben realizar empresas de seguridad privada autorizada”. ¿Los organismos chilenos del sector como explican que no lo hayan tenido en cuenta? Revela también la responsabilidad de sus casas matrices.
Con anterioridad al informe de la colusión, la Fiscalía entregó un documento con recomendaciones sobre el mercado del gas a partir de algunas constataciones señaladas por r una persona natural y no una empresa y es también la primera vez que se sancionan a Ricardo Riesco: “Alta concentración, integración horizontal y vertical, asimetría regulatoria de este servicio básico respecto de otros servicios básicos (luz y agua), diferente la estructura del mercado a lo que es propio de otros países OCDE”. Propone eliminar un artículo transitorio de la ley del sector, el cual permite a Metrogas hacer adquisiciones de una empresa relacionada, “que tiene la misma composición accionaria, y el aumento del costo que está haciendo Metrogas lo está traspasando al consumidor final”.
Hugo Fazio
Noviembre de 2021